Esta noche desde las 20.15 en el estadio Centenario se juega la final de la denominada Supercopa del Fútbol Uruguayo, en su segunda edición.
En el 2018 fue ganada por Peñarol que derrotó a los tricolores por 3 a 1.
En el aurinegro, el entrenador Diego López, no confirmó el equipo, pero lo tiene definido y pronto para ganar el segundo clásico de verano y repetir el título de campeón de la Supercopa Uruguaya.
Cristian Rodríguez, el capitán recuperado, en cancha y al comando de la ofensiva.
El once titular aurinegro… Kevin Dawson, Giovanni González, Fabricio Formiliano, Enzo Martínez, Lucas Hernández, Guzmán Pereira, Walter Gargano, Fabián Estoyanoff, Agustín Canobbio, Cristian Rodríguez y Gabriel Fernández.
Thiago Cardozo, Yeferson Quintana, Jesús Trindade, Rodrigo Rojo, Marcel Novick, Ignacio Lores, Brian Rodríguez, Lucas Viatri y Gastón Rodríguez, completan la nómina de 20 futbolistas convocados para el clásico.
Oscar Ferro, por primera vez… El entrenador de arqueros será el encargado de dirigir al equipo desde el banco. Diego López, suspendido y su asistente el italiano Michele Fini, deciden por estas horas si concurren al Estadio Centenario.
En Nacional el entrenador Eduardo Domínguez no dio pistas sobre el equipo. Todo hace indicar que podría mostrar la figura 4-3-2-1.
Esteban Conde, el capitán recuperado y en la custodia del arco.
Matías Zunino en el lateral derecho, Rafael García y Felipe Carvalho en la zaga central y Alvaro “Palito” Pereira –cumpliendo el sueño de vestir la casaquilla tricolor- por la izquierda.
Felipe Carballo, Joaquín Arzura y Gabriel Neves, en zona de volantes, con el juvenil Santiago Rodríguez cumpliendo la función de enganche.
Sebastián Fernández y Gonzalo Bergessio, la dupla del gol.
Luis Mejía, Marcos Angeleri, Matías Viña, Guillermo Cotugno, Mathías Cardacio, Gonzalo Castro, Rodrigo Amaral, Kevin Ramírez y Facundo Labandeira, completan la nómina de 20 futbolistas convocados para el clásico.
Los componentes del plantel se entrenaron en el campo de juego del GPC, ante el aliento y la atenta mirada de más de 4.000 hinchas. Trabajos físicos y en espacios reducidos, con los arqueros siendo ejecutados a puro balazo en el arco que se encuentra delante de la cabecera Héctor Scarone.